En el corazón de la Amazonía, donde la selva se encuentra con los ríos, Las vidas que lleva el pescado, emerge como un proyecto fotográfico que captura la esencia de la pesca artesanal, dentro de un río llamado El pescado, ubicado en el municipio de Belén de los Andaquíes, una tradición que lentamente se desvanece. Esta serie de imágenes no solo documenta el proceso de la pesca, sino que también narra las historias de las comunidades que dependen de esta práctica para su subsistencia, de cómo ellos pasan la mayor parte de su vida en el agua.

Los pescadores locales, con sus técnicas ancestrales, su profundo conocimiento de los ríos y sus ecosistemas, representan un vínculo vivo con la naturaleza y una forma de vida sostenible. Sin embargo, la modernización, la sobrepesca, el calentamiento global y grupos al margen de la ley, están amenazando este modo de vida, poniendo en riesgo tanto la biodiversidad como la riqueza cultural del municipio.

A través de este proyecto, buscamos resaltar la importancia de preservar estas tradiciones y la urgente necesidad de proteger los recursos naturales que las sustentan. Las imágenes capturan momentos íntimos y auténticos, el esfuerzo de lanzar redes al agua al amanecer, la paciencia al esperar la captura, la alegría y el sentido de comunidad al compartir el fruto del trabajo. Ofrece una ventana a un mundo que puede parecer lejano pero que está intrínsecamente conectado con el bienestar del planeta, teniendo en cuenta que la pesca artesanal en la Amazonía no solo es vital para las comunidades locales, sino que juega un papel crucial en la salud de los ecosistemas globales.

Este proyecto fotográfico invita a los espectadores a reflexionar sobre la interconexión entre cultura, tradición, medio ambiente y el valor de las prácticas que mantienen vivo el espíritu de la Amazonía.